El Gótico en España

La arquitectura gótica se introdujo en España, a finales del siglo XII, con relativa prontitud desde su nacimiento en Francia. Su consolidación fue lenta, combinándose en sus primeros momentos los elementos arquitectónicos románicos y góticos. Desde sus inicios hasta llegar al periodo del alto gótico, la arquitectura española se mantuvo fiel a los modelos franceses. Sin embargo, algunas características como la insistencia en tipos de plantas de estilo románico o la conservación de elementos decorativos islámicos condujeron a la formación de variantes estilísticas locales, este proceso se acrecentó a finales del siglo XIII y durante el siglo XIV, en los que apareció una amplia diferenciación en las formas arquitectónicas y decorativas regionales. El desarrollo de la arquitectura en España durante estos siglos reflejó las diferentes circunstancias históricas a las que estaban sujetos los diversos reinos hispanos. Así sobre todo en el sur de España el desarrollo del gótico se adoptó tardíamente. Por su parte la prosperidad económica en Cataluña estimuló la construcción civil en esta zona. A finales del siglo XV surgió un estilo panaespañol, característico del círculo de los Reyes Católicos, que nació del encuentro de estructuras tardogóticas europeas con decoraciones mudéjares y motivos renacentistas.
 

Difusión


La difusión de la arquitectura gótica en España tuvo tres vías principales de penetración, la primera fue la arquitectura cisterciense que se extendió por todo el país y que antes del siglo XIII llevó a la construcción de los grandes conventos de la Orden reformada, precedentes del arte gótico.2 La segunda vía fueron las relaciones mantenidas entre el Condado de Barcelona con el Languedoc y Provenza en Francia y el contacto de los obispos catalanes con los de Narbona y Montpelier. La tercera vía se produjo en Castilla y León, donde los matrimonios de varios reyes con princesas de las casas de Anjou, Borgoña y Plantagenet motivaron la introducción del gótico francés en la zona central.

La transición entre el estilo románico y el gótico se produjo de manera lenta en España, por los recelos que despertaban las nuevas estructuras góticas, de carácter revolucionario en ese momento. El primer elemento gótico que se incorpora a la arquitectura española es la bóveda de ojiva, su aparición se efectúa hacia el año 1170, por vía de la Orden del Cister. Una manifestación de este tránsito está en el hecho de que algunos edificios se comiencen a labrar de forma gótica y posteriormente se continúan bajo esquemas románicos. La combinación de ambas formas se funden en un estilo de transición, que tiene sus principal presencia en las catedrales de Tarragona comenzada en 1174, Lérida (1203), Ávila (1170) y Cuenca (1196).

Catedral de Burgos

La Catedral de Santa María de Burgos es un templo católico dedicado a la Virgen María situado en la ciudad española de Burgos. Su nombre oficial es Santa Iglesia Basílica Catedral Metropolitana de Santa María de Burgos. Su construcción comenzó en 1221, siguiendo patrones góticos franceses. Tuvo importantísimas modificaciones en los siglos XV y XVI: las agujas de la fachada principal, la Capilla del Condestable y el cimborrio del crucero, elementos del gótico avanzado que dotan al templo de su perfil inconfundible. Las últimas obras de importancia (la Sacristía o la Capilla de Santa Tecla) pertenecen ya al siglo XVIII, siglo en el que también se modificaron las portadas góticas de la fachada principal. El estilo de la catedral es el gótico, aunque posee, en su interior, varios elementos decorativos renacentistas y barrocos. La construcción y las remodelaciones se realizaron con piedra caliza extraída de las canterasdel cercano pueblo burgalés de Hontoria de la Cantera.

En la catedral se conservan obras de artistas extraordinarios, como los arquitectos y escultores de la familia Colonia (Juan, Simón y Francisco), el arquitecto Juan de Vallejo, los escultores Gil de Siloé, Felipe Bigarny, Rodrigo de la Haya, Martín de la Haya, Juan de Ancheta y Juan Pascual de Mena, el escultor y arquitecto Diego de Siloé, el rejeroCristóbal de Andino, el vidriero Arnao de Flandes o los pintores Alonso de Sedano, Mateo Cerezo, Sebastiano del Piombo o Juan Ricci, entre otros muchos.

El diseño de la fachada principal está relacionada con el más puro estilo gótico francés de las grandes catedrales de París y Reims, mientras que el alzado interior toma como referencia a la Catedral de Bourges. Consta de tres cuerpos rematados por dos torres laterales de planta cuadrada. Las agujas caladas de influencia germánica se añadieron en el siglo XV y son obra de Juan de Colonia. En el exterior son sobresalientes también las portadas del Sarmental y la Coronería, góticas del siglo XIII, y la portada de la Pellejería, con influencias renacentistas-platerescas del siglo XVI.

Numerosos son los tesoros arquitectónicos, escultóricos y pictóricos de su interior. Destacan:

  • El grandioso cimborrio gótico-plateresco, alzado primero por Juan de Colonia en el siglo XV y reconstruido por Juan de Vallejo en el XVI.

  • La Capilla del Condestable, maravilla del gótico isabelino, en la que trabajaron la familia Colonia, Diego de Siloé y Felipe Bigarny.

  • El minucioso retablo gótico hispano-flamenco de Gil de Siloé para la Capilla de Santa Ana.

  • La sillería del coro, obra renacentista plateresca de Bigarny.

  • Los relieves tardogóticos de la girola, de Bigarny.

  • Los numerosos sepulcros góticos y renacentistas.

  • La renacentista Escalera Dorada, de Diego de Siloé.

  • El Santísimo Cristo de Burgos, imagen de gran tradición devocional.

  • La significación histórica envuelve la tumba del Cid y su esposa Doña Jimena, su carta dearras y su cofre.

  • El popular Papamoscas, estatua articulada que abre la boca al dar las campanadas de las horas, reclamo habitual de los visitantes.


Catedral de Toledo

La catedral de Santa María de Toledo, (España), llamada también Catedral Primada de Toledo, sede de la Archidiócesis de Toledo, es un edificio de arquitectura gótica, considerado como el magnum opus1 del estilo gótico en España. Su construcción comenzó en 1226 bajo el reinado de Fernando III el Santo y las últimas aportaciones góticas se dieron en el siglo XV cuando en 1493 se cerraron las bóvedas de los pies de la nave central, en tiempos de los Reyes Católicos. Está construida con piedra blanca de Olihuelas

La estructura del edificio tiene gran influencia del mejor gótico francés del siglo XIII pero adaptado al gusto español. Mide 120 m de longitud por 59 m de ancho. Consta de 5 naves más crucero y doble girola. Las naves externas presentan una anomalía extraña al ser algo más anchas que las otras dos. La parte más antigua del templo es la cabecera que mantiene en su arquitectura los triforios originales que se extendían a lo largo de las naves de donde fueron suprimidos en una de tantas reformas y evoluciones que sufrió la catedral. Todavía en época del gótico, estos triforios fueron sustituidos por los grandes ventanales-vidrieras. Los que se conservan de la cabecera son de influencia mudéjar. El más bajo está compuesto de arquillos lobulados que descansan en columnas pareadas y el alto presenta unos arcos entrecruzados típicos del mudéjar. No se sabe si estos temas mudéjares existían en la anterior mezquita y fueron copiados como recuerdo o bien se añadieron en una de las mejoras y enriquecimiento de la fábrica, como algo original y de buen gusto.

En la cabecera se encuentra la doble girola que es doble como corresponde a una planta de 5 naves. Esta doble girola es de proporciones grandiosas y está enriquecida por elementos arquitectónicos y por un original abovedamiento.

Los tramos de la girola correspondientes a las distintas capillas se solucionaron con plantas alternativas de rectángulos y triángulos, lo que hizo que cada capilla fuera de distinto tamaño, más grandes las rectangulares y más pequeñas las triangulares. Esta manera de distribuir la cabecera puede verse en las catedrales francesas de Notre Dame en París,Bourges y Le Mans, siendo esta última la más parecida aunque las tres son más esbeltas en conjunto que la española. Las distintas reformas que se hicieron a través del tiempo alteraron la disposición de algunas de las capillas; en algún caso se reconstruyó una sola capilla en un espacio de tres. (Véase capilla de Santiago nº 7 en el plano y capilla de San Ildefonso nº 8 en el plano).

Las bóvedas de las naves son cuatripartitas excepto en el crucero y capilla mayor en que se refuerzan con terceletes.
 

Catedral de León

La actual catedral de León, iniciada en el siglo XIII, presenta un diseño del más depurado estilo gótico clásico francés. Conocida como la pulchra leonina1 y catedral de Santa María de Regla. Se encuentra en pleno Camino de Santiago. Es junto a la Catedral de Burgos una de las mejores muestras del Gótico español.

La planta es casi una réplica de la Catedral de Reims aunque en formato algo menor. Tiene unas dimensiones de 90 m de larga, 30 m de alta y 29 m de ancha. Dividida en tres naves, de la entrada al transepto, y cinco naves del transepto al altar mayor. La catedral presentamacrocefalia, es decir una cabecera de mayor tamaño que lo común (el ancho del transepto en este caso) y que le resta algo de profundidad y perspectiva pero a cambio le brinda mayor espacio para los fieles (debido a estar en el camino de Santiago su afluencia era mayor). En sus muros presenta 125 ventanales, con 1.800 m² de vidrieras policromadas de origen medieval, siendo consideradas de las mejores del mundo en su género. De ellas, destacan el gran rosetón central situado en el pórtico central, entre las dos torres de aguja, así como las de la Capilla Mayor, el transepto norte y la Capilla de Santiago.

El siglo XIV supone el esplendor del gótico en las áreas mediterráneas, de Cataluña, Valencia y Mallorca. La diversidad climatológica, la influencia francesa e italiana y la configuración social marcan el estilo gótico en estas zonas, con rasgos propios. Son construcciones de exteriores sobrios y macizos, los templos presentan la denominada planta de salón, con naves laterales de la misma altura que la central, y ausencia de arbotante, con escasa decoración escultórica, caracterizado por la influencia de las iglesias del sur de Francia y la casi nula aportación del arte mudéjar. La preocupación por la perfección y la pureza constructiva sustituye al afán decorativo de la arquitectura castellana. También destaca mucho la arquitectura civil. Sus mejores ejemplos son Catedral de Barcelona, Catedral de Gerona, Catedral de Palma de Mallorca e Iglesia de Santa María del Mar.